España es un país con varias zonas costeras únicas y sorprendentes. Una de las más características de la geografía nacional es, sin duda alguna, la Costa Brava. Ubicada en torno al Cabo de Creus y definida como el punto más oriental de toda la Península Ibérica, es la región definida por los municipios de Cadaqués, La Selva de Mar, Vilajuiga, Pau, Palau-Saverdera y Rosas. Sin embargo, lo que más atrae y llama la atención de ella es, sin duda alguna, la limpieza de sus cristalinas aguas, acompañadas de calas tranquilas y de localidades repletas de historia.
¿Tienes planeado disfrutar de unas vacaciones en la Costa Brava? En ese caso, vamos a ofrecerte algo que te va a interesar, vamos a presentarte los sitios que no te puedes perder de la Costa Brava.
Los sitios que no te puedes perder si vas a la Costa Brava
La Costa Brava es un destino ineludible para los amantes del turismo de sol y playa, pero también para quienes buscan unas vacaciones con tintes culturales e históricos. En la selección que te traemos vas a encontrar de todo, y puedes buscar mucho más si te atreves a aventurarte un poco más en la región. Eso sí, antes de empezar, te recomendamos que eches un vistazo a buenos alojamientos. Por suerte, puedes encontrar auténticos chollos en la Costa Brava con buscounchollo.com, así que no tendrás problemas a la hora de dar con buenos lugares en los que hospedarte a precios competitivos.
Dicho esto, vamos a ver cuáles son esos lugares imprescindibles a visitar si vas a la Costa Brava. Toma nota, porque son totalmente obligatorios si realmente quieres descubrir el encanto de esta parte de España:
Tossa de Mar
Tossa de Mar es nuestra primera recomendación por dos razones. La primera de ellas es la localidad en sí, coronada por un enorme recinto amurallado que la define por completo. Este pueblo derrocha arte por los cuatro costados y tiene ofertas de ocio de sobra para que no te aburras ni un segundo. Aunque no solo destaca por ese toque cultural y de ocio de la localidad, como ya adelantamos.
¿Por qué? Porque sus playas también son ideales. Puestos a recomendar una, sin duda debería ser Cala Pola. Es de las más bonitas que vas a encontrar cerca de la localidad, ubicada entre acantilados, de arena gruesa, por con unas aguas que tienen un color azul turquesa que resulta hasta hipnótico. De lo mejor que vas a encontrar en la Costa Brava y, por tanto, una primera parada más que obligatoria en tus vacaciones.
Figueres
Un municipio que se aleja un poco de las zonas playeras, pero que ofrece razones de sobra para que abandones la arena y el mar. Figueres es el lugar de nacimiento de Salvador Dalí y, como tal, destaca ya no solo por la originalidad de algunas de sus estructuras arquitectónicas, sino también por el Teatro-Museo Dalí, en el que conocer mucho más sobre la historia de este pintoresco artista español. Podemos decir sin miedo alguno que es una visita obligatoria si vas de viaje por la Costa Brava, ya que sus edificios, sus murallas mediavles y hasta su castillo son de lo más inolvidables. No dudes ni un segundo en pasar por esta localidad, no te arrepentirás.
Lloret de Mar
El enclave turísico por excelencia de toda la Costa Brava. Si eres de esas personas que disfrutan con las calas recogidas y de aguas cristalinas, tienes que venir aquí. Reúne una de las ofertas de ocio más variadas y ricas de toda la costa y, además, ofrece también cosas para quienes no se conforman solo con disfrutar de sol y buenas playas. Solo tienes que echar un vistazo a su casco histórico, repleto de magia y de historia.
Girona
La ciudad de Girona es la gran capital de la provincia clave de la Costa Brava. Como tal, puede presumir de tener uno de los patrimonios más ricos del lugar, repleto además de estructuras de corte medieval y con un recinto amurallado que es de visita obligatoria. Sus puntos más destacados son, sin lugar a duda, la orilla del río Onyar, repleta de casas de colores que le dan un aire de lo más divertido; y la gran catedral que está dentro de la Força Vella. Dicen que Girona enamora, y desde luego no es para menos.
Besalú
Un lugar que se aleja de la costa, pero que derrocha encanto, sobre todo si eres de esas personas que prefiere las visitas a lugares de campo y/o montaña. Besalú tiene el honor de formar parte de los pueblos medievales mejor conservados de España, y basta con echarle un vistazo para darse cuenta de ello. Con recorrer cualquiera de sus calles te sentirás como si hubieras viajado varios siglos atrás en el tiempo. Paredes y suelos de piedra, callejones estrechos, murallas y un puente románico que lleva construido desde el siglo XII son sus rasgos más característicos. Si vas a la Costa Brava, debes visitarlo.
